Product Description
Este vino fino, en rama (sin filtrar ni clarificar), seco, almendrado y muy fragante, ha sido elaborado con la variedad de uva palomino fino, en parte palomino 84, en completa maduración. Su crianza biológica se desarrolla por el sistema tradicional de criaderas y soleras cerca de diez años, en viejas botas de roble americano, en la Bodega Viña Santa Petronila, la Bodega de vino de Jerez más pequeña del Mundo. La producción anual es de unas 800 botellas al año.
Seleccionado de uno de los mejores viñedos de Macharnudo en el Marco de Jerez, con la blanca tierra albariza, cruciales en la fabricación de estos vinos de jerez de alta calidad. La arcilla, calcio y composición fósil de sedimentos del mar surten efecto en el sabor salino de las uvas, que con la luz del sol ayuda a la maduración. Esta albariza, formada por caparazones silíceos de algas diatomáceas de gran esponjosidad; permite conservar en el subsuelo la reserva hídrica para la nutrición constante del viñedo, que no se riega; factores que le dan la singularidad única a los vinos de Santa Petronila, en Macharnudo Bajo, de la zona del Jerez superior. Orientación geográfica Noreste-Suroeste, bajo la influencia de los frescos vientos del atlántico del Poniente en alternancia con los secos del Este (levante).
De color amarillo pajizo subido, subiendo en la copa la tonalidad a dorado, reflejando esa crianza bajo velo de flor y una madura vejez. Aroma expresivo, complejo, salino, punzante y espirituoso de larga crianza, floral y aromáticos frutales. En boca persistente, sabroso, fino amargor, a la vez que delicado y fresco en el paladar. Con post-gusto almendrado, nos dejará una agradable sensación de frescor, dando más sabor a la comida.
Santa Petronila es un vino de 15,5% de alcohol, muy criado y muy fino, perfecto no solo como sabroso aperitivo, sino para acompañar el marisco, jamón, el sushi, el salmón, otros pescados o acompañando toda la comida.
Aconsejamos tomarlo frio, en catavino grande o copa de blanco, alrededor de 10º. Entre 6º-10º como aperitivo y si quiere saborearlo en todo su esplendor, entre 8º-12º.
Al no tener procesos de clarificado, ni filtrado, no conservantes, al ser “En Rama”, es decir de la bota directamente a la botella, se aconseja consumir antes de los tres meses, y una vez abierto, si le sobra (que lo dudo), disfrútelo al siguiente fin de semana.